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Con 406 competidores procedentes de 49 países de Asia, Europa, Oceanía y America, se realizó en Lima, el Campeonato Mundial Cadetes 2024. El mega-evento planetario se llevó a cabo en la Villa Deportiva Nacional de Perú del 28 al 31 de agosto.
En un campeonato muy exigente en cuanto al nivel competitivo,  el seleccionado nacional cadete de los 66 kilos, Boris Cárcamo, logró la primera victoria de un chileno en un Mundial de esta categoría, al derrotar a Agustin Ledesma de Paraguay por waza-ari. Cárcamo, puntuó al minuto 2:06 de combate con un preciso o-uchi-gari, ventaja que supo mantener durante todo el encuentro. En segunda ronda, Cárcamo caería contra el representante de Suecia, Alexander Marlov, por kansetsu-waza.
Por su parte, Ariany Silva se convirtió en la primera judoka cadete de Chile en pasar a segunda ronda en una cita planetaria de esta división al vencer a la seleccionada de la India, Bipilia Yumnam, con un potente soto-makikomi. Cabe destacar, que Ariany dominó el encuentro marcando a los 8 segundos de iniciado el combate con harai-makikomi (waza-ari) el cual encadenó con un ushiro-kesa-gatame que estuvo a segundos de convertirse en waza-ari-awasete-ippon. En segunda ronda, Silva caería por shime-waza ante la estadounidense Jayda Fulp.
En la última jornada mundialista, otro judoka chileno que destacó con su performance fue Patricio Urra quien también ganó su primera contienda derrotando al canadiense Arthur Stivenson por waza-ari. “Patito” dominó el juego de agarres de principio a fin, lo que derivó en dos shidos para el norteamericano. Cuando el tablero marcaba los 3:06 minutos, Urra logró puntuar con una preciso ashi-guruma consiguiendo el waza-ari que le daría el triunfo. En segunda ronda, en un combate muy cerrado que se definió en el golden-score, Urra cayó por ippon ante José Brache de República Dominicana.
Regresan sin sumar victorias, pero con la mochila llena de aprendizajes y con la tranquilidad de darlo todo en el tatami, los judokas: María Valencia (48 kilos);  Deyvi Valenzuela (50 kilos); Jhon Madrid (55 kilos); Catalina Sepúlveda (57 kilos); Kharla Casas (70 kilos); Gabriel Pérez (73 kilos); Luciano Jiménez (81 kilos); y Angel Robles (90 Kilos).
Cabe destacar el acompañamiento técnico de los sensei: Cindy Cortés, José Quijada, Gustavo Zepeda y Marco Soto. Como árbitro, nos representó el sensei Roberto Correa.
La Federación de Judo de Chile FDN agradece a nuestros jóvenes representantes que junto a sus clubes y familias, asistieron a un evento de altísima complejidad deportiva que contó con la presencia de las grandes potencias del judo mundial. Vamos por buen camino. Cada actividad realizada para potenciar nuestro judo ha tenido sus efectos. En un contexto actual más favorable para el judo chileno, con un nuevo Head Coach, un Cuerpo Técnico experimentado y una comunidad judoka con ganas de superarse, sólo podemos avanzar y seguir creciendo. ¡Vamos Chile!